El Ayuntamiento de Alcalá de Henares, a través del personal del Departamento de Obras, Conservación de la Ciudad y Edificios Municipales, llevó a cabo rehabilitación de escenarios en la plaza de Cervantes.
En particular, la base de la fachada exterior del templo se pintó con una imprimación de color blanquecino y gris. Se utilizó pintura de silicato mineral, según señalan técnicos municipales Departamento de Patrimonio Histórico.
Además, las puertas y ventanas de la glorieta también fueron pintadas y restauradas con esmalte.
Consejero de empresa, Manuel Lafrontél dijo “Intervenimos en el quiosco de la plaza de Cervantes, cuyo rodapié estaba dañado, pintamos puertas y ventanas. Se trata de una intervención muy simbólica en uno de los monumentos más queridos de Alcalai, cuya construcción se completó el 11 de abril de 1898.“
